La elección del Presidente francés determinará el futuro de Europa.
Laurent Gantner
Nos habían soltado (lanzado) un poco los franceses durante el referéndum en el TCE en 2005, arropado en promesas europeas de prosperidad, dibujadas a los contornos de una gran potencia (fuerza) continental, que todavía se fueron, a una semana de la votación cerca, sacralizar "sí" antes de que los rumores de victoria de "No" acaben por desmigajar todo y batir en brecha el edificio sólido que no veía despuntar para el horizonte de los reembolsos de la deuda, una crisis que podría poner en movimiento bien (quebrantar bien), a su vuelta, las previsiones hechas a los números (medidas) gruesos puestos por delante para estas Elecciones presidenciales. De un lado François Hollande que no efectúa la desempolvadura que harían falta archivos del socialismo de Mitterrand, reparé desde hace tiempo por JL Mélenchon cuya presencia a este nivel no tiene nada de una emboscada arribista o de un golpe forrado ideológico sino constituye bien la recuperación (reactivación) de esta esperanza que nos ha sido confiscada durante 30 años. Para sobrepasar esta privación, no vacila en enganchar la dinámica de una revolución ciudadana por las urnas que no correrá peligro de irritar el espíritu republicano y democrático de cada uno… Pero hay que ir allá hacia esta VI República y más allá de todas las modificaciones que aportarán el fortalecimiento del derecho de los asalariados, la nueva distribución más igualitaria (hacia la base salarial) activos del trabajo ; es este grito de alerta echado (puesto) a los mecanismos financieros de Europa que no reclama una administración diferida o superior sino una revisión urgente y un neceser de su sistema de (re)distribución donde, hasta ahora, la alza de los precios fuerte sólo confirmó la calibración de las grandes fortunas y sólo limitar el desarrollo según clásicos y categoriales "regiones más portadoras que otras" las que mismas delimitan "barrios (cuartos) menos favorecidos que otros", a su torre (vuelta) que cuadricula (divide en zonas) lo que diferencia a los "ricos" de los "pobres" en "los que trabajan" de "los que no trabajan"…